El evento se produjo como consecuencia de la brusca entrada en la atmósfera terrestre de un fragmento desprendido de un cometa a una velocidad de unos 54.000 km/h. La bola de fuego se inició a una altura de unos 102 km sobre el nivel del mar, finalizando a una altitud de unos 61 km sobre el Mediterráneo.
La imagen de abajo muestra el espectro de emisión del bólido tal y como se ha registrado con la cámara del Proyecto SMART ubicada en el Observatorio de Sierra Nevada.